La miel que ofrecemos es resultado del trabajo incansable y paciente de las abejas a las que acompañamos en su desarrollo. Las colmenas ubicadas en este bello paraje estan rodeadas de todo lo necesario para su supervivencia. Nuestro cometido es por tanto la mera comprobacion de que todo se desarrolla con normalidad. Y sino fuera este el caso, de la forma menos invasiva, llevariamos a cabo los procedimientos necesarios para que todo discurra nuevamente de forma natural. La vida de una colmena está logicamente enfocada a su propio desarrollo y supervivencia, y en algunos casos, los más óptimos, a su expansión. Son esas colmenas, las que se desarrollan por encima de sus necesidades, las que nos proporcionan esa cantidad de miel que extraemos.

Dicha extraccion igualmente debe ser objetiva y limitada para que una vez terminemos con la misma, la colmena quede dispuesta para pasar el invierno de forma natural sin mermas en poblacion y salud. Es un orgullo ver como con el paso de los años nuestro trabajo es gratificado con un mejor desarrollo de todas ellas y la obtención de ese preciado trabajo, hecho miel.
El cultivo, aprovechamiento, y cuidado de las poblaciones de abejas ayuda a nuestros campos. Siendo un factor fundamental para el desarrollo de las cosechas. Nuestra responsabilidad es mantener estas poblaciones y tu consumo de miel es parte del proceso.
Las colmenas de nuestras abejas están situadas en un paraje sin igual, dentro del término municipal de Valbuena de Pisuerga (Palencia), y al lado del antiguo enclave del Priorato de La Quinta, también llamado de la Granja, y que da nombre a nuestros productos.

Por último, indicar que la miel natural que producimos, por su pureza, tiende a cristalizarse. Debido a ello, para su consumo recomendamos calentarla al baño maría, así como conservarla en un ambiente seco alejado de la luz para que en ningún momento mermen sus propiedades.